Subir hasta La Satalia caminando desde Paral·lel es todo un reto físico. De Paral·lel a Blai, apenas se nota inclinación; de Blai a Magalhães ya te empiezas a quitar la chaqueta; de Magalhães al Passeig de l’Exposició nos encontramos los primeros tramos con escaleras; y de aquí a La Satalia, prepara las cuerdas y el piolet. Es broma. A medias.
Este núcleo de viviendas de Montjuïc destaca por dos factores principales: sus bonitas casas modernistas y sus impresionantes vistas de Barcelona. Y tener unas vistas así se paga con sudor, ya que aquí no hay escaleras mecánicas como en el Park Güell o en otros turons de Barcelona. Y quizá aquí resida parte de su encanto, ya que son pocos los visitantes que llegan hasta este rincón de la ciudad. Aunque también hay otros accesos aparte de las escaleras desde Poble Sec: subir en el funicular de Montjuïc hasta la avenida Miramar y bajar unas escaleras, o acceder desde un lateral de los jardines del Grec.
¿Qué se puede hacer por aquí? Si buscas locales de ocio o restauración, es mejor que te quedes por la zona de Poble Sec, ya que La Satalia es un barrio exclusivamente residencial. Pero es un sitio ideal para disfrutar de las vistas y del aire limpio de Montjuïc mientras paseas por sus calles. Como el passatge Antic de València, un estrecho callejón que mantiene su trazado de origen romano. Pocas calles, pero con carácter. Y con viviendas unifamiliares de estilo modernista, algunas con jardín o huerto, otras decoradas con columnas salomónicas de ladrillo, todas ellas con mucho encanto.
Si eres habitual de Poble Sec, posiblemente hayas paseado ya por aquí. Pero si no lo conoces, recomendamos que aproveches tu próxima visita a Montjuïc para conocer estas calles tranquilas y llenas de hiedra y buganvilla.